Sucesos

Infanticidios en España, una realidad presente en nuestro país

¿Qué es un infanticidio activo y pasivo? ¿Qué es un parricidio? ¿Por qué España es propensa a este tipo de delitos? El asesinato del pequeño Gabriel Cruz, el caso Bretón, el Crimen de Moraña o el Caso Cesuras se convierten en el lado más oscuro de la crónica negra de nuestro país

Terminar con la vida de un niño es una práctica cruel situada en el lado más extremo de las conductas criminales. Los últimos 20 años se han llenado de casos similares al pequeño Gabriel, sucesos que nos recuerdan que los infanticidios no son un hecho aislado y que se reproducen con cierta periodicidad afirma Francisco Canals, periodista especializado en sucesos. El infanticidio directo o activo sucede cuando se provoca la muerte a un niño recién nacido de forma deliberada. El infanticidio indirecto o pasivo ocurre cuando el asesino provoca el fallecimiento del menor a través de prácticas indirectas como un abandono de la educación o una alimentación inadecuada.

La última década se ha teñido de crímenes intrafamiliares: el 7 de octubre de 2010 dos niños de 2 y 6 años aparecieron muertos en su casa de Tarragona a manos de su padre. En 2011 tuvo lugar el mediático caso de José Bretón quien fue condenado a 40 años de cárcel por matar e incinerar a sus dos hijos. En diciembre de 2011 dos hermanos de 10 y 5 años aparecieron asesinados en un apartamento de Tenerife. Ya en Pontevedra David Oubel fue acusado de haber matado a sus dos hijas utilizando una sierra radial después de haberlas sedado para impedir que pudieran defenderse. En Santa Cruz de Tenerife dos menores de 11 y 5 años fueron asesinados por parte de su madre. En 2013 (Ciudad Real) un hombre fue detenido y procesado por matar con un cuchillo a todos sus hijos en la localidad de Ubique (Cádiz).

En el 2017 Javier, de 11 años, aparecía muerto en una zona boscosa del municipio gallego de Oza-Cesuras. Días después se detenía al padre (Marcos M.M.) acusado de asesinar a su hijo con ayuda de un objeto contundente. En 2014 (Oviedo) Imran, un bebé de 20 meses era asesinado por parte de su padre tras una brutal paliza. Ya en el 2013 Asunta, una niña de 12 años era asesinada por Alfonso Basterra y Rosario Porto convirtiéndose en uno de los casos más controvertidos de la historia reciente.

En nuestro país también han proliferado casos de patricidios en los que menores deciden terminar con la vida de sus padres. El asesino de la Catana (José Rabadán) asesinó a su hermana y sus dos padres; el responsable de la matanza consiguió acogerse a la Ley del Menor y pasó solo 6 años en prisión más 2 de libertad vigilada.

Fuente: Francisco Canals, periodista especializado en sucesos / Tel prensa: 913804419 – 6770­28639