Para más datos e info ampliada (Francisco Canals) periodista especializado en sucesos
Desapariciones sin explicación aparente y que escapan a la comprensión policial. El caso de los niños Isidro y Dolores Orrit; el caso de Paco Molina en Granada o Josué Monge (en Sevilla). Se trata de desapariciones que escapan a la comprensión policial; se caracterizan por sus extrañas circunstancias, la total ausencia de pruebas y por no cuadrar en ninguno de los arquetipos policiales como pudieran ser móviles sexuales, divorcios o entornos conflictivos. La criminología contemporánea nos recuerda periódicamente, la existencia de estos casos.
Los niños Isidro y Dolores Orrit (de 6 y 17 años de edad) desaparecieron inexplicablemente del Hospital Sant Joan de Deu de Manresa (Barcelona) donde uno de ellos estaba ingresado (1988). El personal médico vio a los 2 menores en su respectiva habitación; el equipo de enfermería que los atendía comprobó en una de sus entradas y salidas habituales que los 2 menores ya no estaban. El caso de Josué Monge (Dos Hermanas, Sevilla) el adolescente llegó a su casa a la salida del colegio, pidió a sus padres salir en bicicleta en las inmediaciones pero nunca regresó a su domicilio. Ya en Granada el caso más destacado es el de Paco Molina, desaparecía el 2 de julo de 2015, a este joven se le pierde la pista cuando quedó con unos amigos en la capital cordobesa, se le pierde la pista en una estación de autobús de la misma localidad.
Desapariciones inexplicables en cruceros (son más frecuentes de lo que parecen y aún nadie ha logrado una explicación) se ha creado incluso una asociación de víctimas de desaparecidos/as en cruceros (AIVC). En España existen numerosos afectados. El caso de Lesli Michel, una niña de 10 años de edad quien desapareció dentro de su propio domicilio en México. James Tetford (soldado norteamericano) desapareció el 1 de diciembre de 1949 en el interior de un autobús repleto de pasajeros; distintos testimonios aseguraron que le vieron dormir en el interior del autobús y desapareció sin que este se hubiera detenido afirma Francisco Canals, periodista de sucesos. A nivel internacional hay casos documentados de personas que han desaparecido dentro de su propio domicilio; familiares no han podido dar una explicación lógica a desapariciones espontáneas dentro de contextos familiares normales.
Ya a nivel internacional encontramos casos como el de Jarrod L.y Carrie Pott, fueron vistos (por distintos testimonios) por última vez corriendo en el aeropuerto de Illinois cuando perdían el embarque a su vuelo con destino a Dallas. Nunca llegaron a embarcar y su pista se perdió en la terminal sin que la Policía ni cámaras de seguridad lograran encontrar explicación alguna.
Fuente: Francisco Canals (periodista) Madrid / 91.3804419 – 677028639 www.fcanals.com