Sitios web que permiten abrir cuentas corrientes en 24 horas, apps que facilitan el borrado de datos o técnicas de microblanqueo con monedas virtuales se consolidan como herramientas tecnológicas usadas por los evasores fiscales.
Internet ya se ha convertido en el mayor escenario globalizador de finanzas; realizar pagos a personas ubicadas a miles de kilómetros se ha convertido en una práctica habitual pero ¿qué papel juega Internet en la ocultación de dinero en paraísos fiscales?
La red se ha convertido en una herramienta logística imprescindible en el complejo arte de ocultar riquezas; en la red han proliferado todo tipo de sitios web, su presencia permite crear sociedades offshore y cuentas internacionales en menos de 24 horas. Tampoco faltan todo tipo de herramientas como las pasarelas de pago con truncado u ocultación de remitentes destinadas a minimizar la trazabilidad de las transacciones bancarias; apps y aplicaciones que permiten borrar datos pulsando una tecla; sitios web que facilitan identidades falsas… se trata de un mercado subterráneo afirma el periodista Francisco Canals en el que no faltan empresas, consultores, empresas de ingeniería informática o firmas de abogados. Algunos paraísos fiscales utilizan servidores propios ante el creciente temor a fugas de informaciones. Hacienda también ha tomado “cartas en el asunto” rastreando portales como Facebook a la caza de signos externos de riqueza.
Las monedas virtuales son otro de los recursos en alza, son fáciles de usar y se utilizan para blanquear u ocultar dinero de manera rápida, se trata de herramientas para el microblanqueo de capitales. En otros casos se envían fondos a paraísos fiscales bajo la apariencia de compra de productos, bienes o servicios a través del comercio electrónico en Internet. Se trata de herramientas atractivas, facilitan los pagos y transacciones internacionales; la red aporta un elevado grado de discreción especialmente para caras conocidas del deporte o la política ya que permiten operar con paraísos fiscales evitando la presencialidad que exigen los bancos tradicionales.
Fuente: Francisco Canals tel prensa 933248203 – 677028639